Es muy importante entender que el mantenimiento de las persianas y el cuidado de los elementos de tu hogar son claves para evitar averías y daños. A continuación te ofrecemos una serie de trucos y consejos para que mantengas tus persianas como el primer día.
Piensa que las persianas son un elemento muy importante del hogar. Aíslan del ruido, del calor, del frío y de la luz. Reparar una avería de las persianas cuesta caro y se puede evitar simplemente teniendo en cuenta su limpieza y engrase, para no descuidar las condiciones y el aspecto de tu casa.
No necesitas ser un manitas experimentado. Con un poco de maña y conociendo los pasos básicos, podrás mantener tus persianas en perfecto estado.
Unas cuantas ideas para el mantenimiento de las persianas te ayudarán a que permanezcan como nuevas de forma muy sencilla:
Limpiar la persiana desde el tambor resultará mucho menos peligroso que asomarse al exterior para limpiar la parte que da a la calle, sobre todo en las persianas que se encuentran situadas en ventanas de gran altura.
Extrae la tapa del tambor en el cual se encuentra enrollada la persiana. La tapa puede estar encajada a presión o con tornillos.
Con un aspirador, elimina el polvo y la suciedad acumulados en el interior del tambor. Limpia las lamas con agua y un producto jabonoso según vayas desenrollando la persiana.
Aprovechando que hemos desprendido el tambor de su sitio, antes de volverlo a colocar, engrasa las guías de la ventana por las que baja la persiana. Aspíralas primero para eliminar la suciedad y el polvo acumulados y luego aplica un aceite especial para que la persiana se deslice con facilidad por ellas.
Cuando limpies la persiana, si observas que alguno de los topes de la misma está roto, aprovecha para cambiarlo por uno nuevo. Tan sólo te hará falta utilizar un destornillador para realizar esta tarea.
Si detectas que falla el mecanismo de enrollamiento de la persiana, debes destapar el habitáculo donde se encuentra enrollada la cinta y comprobar si ésta se ha salido del carril. Si es así, desengancha la correa de su punto de agarre, desenróllala y vuélvela a enrollar dentro de su carril. Una vez enrollada, vuelve a engancharla en su ojal.
Si aplicas todas estas ideas para el mantenimiento de las persianas cada tres meses, éstas lucirán perfectas durante muchos años, evitarás averías y alargarás su vida.
En cualquier caso, si lo crees necesario, no tienes tiempo o simplemente no crees que puedas hacerlo, contacta con nosotros y enviaremos un profesional para hacerse cargo de ello. ¡Llámenos y consulta nuestras tarifas sin compromiso !